Por: Mongui
Está más que claro: genéticamente, las razas no existen, al menos como marca clasificatoria para las personas; sin embargo, determinados grupos de poder continúan aplicando discursos y conductas racializadas, cual mecanismo separador de conglomerados humanos sobre otros.
En ocasiones y terrenos particulares es tan sutil el ejercicio de la degradación, que hasta las propias víctimas se convierten en cómplices y reproductores de estereotipos racistas. Por ello la preocupación en Cuba de combatir desde todos los frentes cualquier manifestación de esta índole, aún cuando se encuentre muy bien escondida, solapada o camuflada.
No debe extrañar, entonces, que el Consejo Popular de Pueblo Nuevo, en las mismísimas entrañas del capitalino municipio de Centro Habana, diera un paso trascendental el jueves 30 de enero, al promover un nuevo espacio para hablar de “raza” y culturas racializadas, donde se discuta, debata y aprenda sobre el fenómeno de la discriminación por el color de la piel y de hecho, se reivindique el aporte del África subsahariana a la cultura universal.
La doctora Patricia Varona, al frente de la iniciativa
Al llamado de la Dra. Patricia Varona Pérez, gestora de la iniciativa, acudieron figuras del territorio y fronteras más allá: el intelectual e historiador Rolando Julio Rensolis, directivo de la Comisión Aponte y de la Casa Museo Quintín Bandera; la DraC. Ileana Hodge, que lidera el Centro de Investigaciones Psicológicas y Sociológicas; el DrC. Ramón Torres, vicedirector científico del Instituto Cubano de Antropología y la MsC. Inaury Portuondo, especialista principal del Museo Casa de África de la Oficina del Historiador de la Ciudad de La Habana, entre otros.
Un espacio para debatir y transformar el barrio
El hecho de que en fecha tan cercana como el 24 de enero se celebrara el Día Mundial de la Cultura Africana, y que el 28 se conmemorara un aniversario más del natalicio del Héroe Nacional, unía una idea convergente lanzada al vuelo hace más de 100 años por el mencionado Apóstol: “El hombre no tiene ningún derecho especial porque pertenezca a una raza u otra: dígase hombre y ya se dicen todos los derechos”.
En consecuencia, el espacio neopoblano hace suya la prédica martiana y quiere dar voz a aquella historia desfavorecida y silenciada de africanos y descendientes, y sistematizar un encuentro mensual donde la comunidad dialogue con invitados acerca de arte, religión, culinaria…, cultura general venida del mal llamado Continente Negro.
Por lo pronto, ya se sabe que este febrero la MsC. Inaury Portuondo disertará sobre el enigmático Elegguá encontrado en la Plaza de Cuatro Caminos y trasladado a una acera del centrohabanero barrio de Los Sitios. ¿Habrá constituido un hecho vindicativo o una irresoluta disposición? Con tales interrogantes, la polémica está garantizada.
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